Trabajos de extinción de incendios por la noche. /
Las vías aéreas se incorporan desde la madrugada a las obras de ampliación
Fue una noche dura para los efectivos que trabajaban para poder perfilar el incendio de la Venta del Moro, concretamente en el Parque Natural de las Hoces del Cabriel, después de que el fuego se saliera de control por la mala climatología con viento de poniente, altas temperaturas y humedad relativa del 11%.
Sobre el terreno hay 4 unidades de bomberos forestales y anfibios, dos dotaciones y 4 brigadas del Consorcio Provincial de Valencia, así como tres mandos y bomberos voluntarios trabajando. A partir de las 7.00 horas se incorporan medios aéreos con dos aviones más y otros dos helicópteros, a los que acompañarán dos aviones más y dos helicópteros con una brigada de helicópteros, según informan desde Emergencias de la Generalitat.
Hasta bien entrada la noche trabajaron más de 300 efectivos de tierra y 20 medios aéreos de los Bomberos Forestales de la Generalitat, los tres Consorcios de Bomberos, los Ministerios del Interior y Medio Ambiente y personal de Castilla La Mancha, que impidieron las llamas. finalmente llegó a la zona de Casas de Moya, que no necesitó ser desalojada.
El fuego se reactivó alrededor de las 15:30 horas de este lunes luego de haberse estabilizado por cambios de viento, desbordando la situación y afectando a 800 hectáreas. Algunas fuentes extraoficiales apuntan a que las 1.000 hectáreas quemadas ya pueden haber sido violadas.
Según la Agencia Estatal de Meteorología, en estos momentos la zona del incendio se está calmando con vientos flojos de levante y temperaturas «ligeramente por debajo de los 20 grados» y la humedad relativa roza el 70% y la previsión es que avance el viento de levante. soplando mañana a una velocidad promedio de 15 a 20 kilómetros por hora.
Los efectivos trabajan esta mañana para controlar las llamas ya que las previsiones para este martes no son muy buenas, con cambio de poniente y tormentas a media tarde.